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Sección Sindical de CGT en Thales

miércoles, 27 de febrero de 2008

El Lechero

El Lechero


Democracia es el sistema político en el cual, cuando alguien llama a tu puerta a las seis de la mañana, sabes que es el lechero


Pues en Thales pasa algo parecido. Resulta que a ciertos trabajadores de baja les llaman a sus teléfonos particulares o les escriben por correo electrónico...y resulta que no es el lechero. Es un “compañero/a” que se preocupa por su salud (compañero que puede estar muy cercano a la causa de la baja en cuestión), o que se interesa por sus intereses y expectativas en estos momentos tan duros “que debes estar pasando”. Gracias, pero la mayoría ya tenemos una familia y amigos que se preocupan de verdad por nosotros, aunque la cuenta de resultados no responda a las expectativas.

Nuestros mandos, directores y técnicos de RRHH deben saber que para un trabajador normal (de esos que trabajan por dinero, en Thales nos consta que hay unos cuantos) que padece una baja laboral recibir una llamada de alguien de la empresa, aunque sea con el loable motivo de interesarse por su salud, resulta ciertamente muy estresante y puede complicar la recuperación del trabajador (sobre todo si la baja está ocasionada por estrés laboral). Es algo fácil de entender si se consigue asumir que Thales no es una gran familia, ni siquiera una pequeña comunidad. Si la empresa tiene interés en conocer la salud de un trabajador dado de baja tiene formas menos agresivas de enterarse del caso, no hace falta hostigar a los trabajadores en su propio domicilio. A no ser que se pretendiera otra cosa resulta claramente fuera de lugar este tipo de intentos de comunicación empleador-trabajador.

Nosotros entendemos que, como ciudadanos libres que somos, tenemos derecho a recibir en casa las comunicaciones que nos interesa recibir, ya sean del lechero, del banco o de la tía la del pueblo. No es admisible que un empleado reciba correos electrónicos o llamadas telefónicas de la empresa que no ha solicitado. Además, sabed que tenéis derecho, como ciudadanos, a preservar vuestra intimidad y la de vuestra familia. Vergüenza les debería dar a algunos/as al prestarse a estas maniobras.

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